no hay cumpleaños sin octava

do the pooh

cumpreanos ledo artista!

Porque resulta que uno es puntual por primera vez en su vida y no debería así que llamo a Rafa y le cuento los cuatro días de la semana que le faltaban por saber y que no se diferencian mucho de los otros tres salvo que le digo que eso ha quedado definitivamente cerrado así que le enviaré esto mañana por la tarde si tengo ganas y no tendré ganas pero se lo enviaré porque hay que hacer cosas como abrir las orejas y enterarse que el grupo está en un atasco y que llegan tarde pero tarde porque es operación retorno a Madrid y el tipo le indica al conductor “por Moncloa: M-o-n-c-l-o-a” mientras se apura una cerveza y yo reprimo la tentación de 1º llamar a Rafa otra vez y 2º darle al mendigo cojo mi entrada en vez los míseros cuarenta céntimos que le doy no sé si por caridad o por lo amable que es con todos los que hacemos cola en el Nasti antes de que uno de ellos se dé una vuelta de media hora para beberse un biofrutas y comerse una bolsa de patatas light al pasar por un cine porno en el que indican la nacionalidad de las películas supongo que porque es importante a la hora de pagar un pase de ese cine que está muy cerca donde conocí a aquella aquella de la que me cuesta acordarme al mirar el bar una y otra vez nada de nada porque al regresar al Nasti toca esperar otra hora ya que se han perdido y han acabado en Colón C-o-l-o-n y se suponía que esto me iba a animar un poco el domingo pero al final llegan y veo la cara de la esperanza con perdón en la cara somnolienta de Ben Chasny apoyada en el cristal se detienen y descargan descargan descargan y el personal se mete en la discoteca donde el grupo monta inmediatamente el escenario y yo me pongo al lado del rubio que se encarga de hacer ruidos con un generador de tono y dos millones de pedales mientras fuma un cigarrillo y le diré a Rafa que Dios afina su guitarra en silencio usando un pedal Boss blanco como el suyo y empiezan a desmontar el Nasti “mucho rocanrol” y mucho ruido porque no hay diferencia entre uno y otro si hablamos de Comets of Fire y hablamos de Comets of Fire el batería es el culpable de todo o a lo mejor es el infernal tráfico de Madrid que le ha dejado así pero no deja de golpear los tambores como si le fuese la vida en ello mientras el cantante berrea algo incomprensible y el bajista apoya el pie en el bombo para que éste no acabe en el servicio y Chasny se retuerce abriendo las piernas como el guitarrista de los Cult esos moviendo la cabeza compulsivamente mientras su telecaster escupe un sonido rugoso como una pared de cemento que se resquebraja una y otra vez una y otra vez por los riffs de los tres porque ésta sí que es la música perfecta para estrellarse contra un muro una y otra vez o lo que es lo mismo la música perfecta para mí y paf se acabó.

[...y recuerda que triste y feliz por todos los tiempos.]