Sunday, April 17, 2016
hybrid palms
Sounds of the Dawn, ese lugar mágico donde encontrar tesoros redescubiertos de la época dorada de la new age music, es ahora además un sello musical dedicado a dar luz a nuevas gemas actuales que vibran en frecuencias afines. Esta primera cinta que publican es una delicia de principio a fin, un lienzo de pinceladas azules, verdes, luminosas, una experiencia sonora que transmite sensaciones de paz y relajación entretejidas de olor a mar y visiones de reflejos del sol en el agua. Es difícil escoger una canción porque cada una de ellas refleja la totalidad de ese mundo cálido y azul. Un mundo tal vez entrevisto en fotografías vintage de un mar de otro tiempo impregnado de vibraciones de calma y placidez.
En general me es difícil hablar de la música que me gusta en términos que no parezcan una carta de amor. Últimamente mucho más, me cuesta hablar de música, y desde luego me es imposible juzgarla con objetividad, si es que existe tal cosa. De todos modos, ¿para qué? Lo que aquí suena es belleza y ya lo único que encuentro energía para hacer en este ámbito es invitar a escuchar y gozar de la experiencia concreta sugiriendo las buenas sensaciones que me despierta. Puedo decir que "Ocean Plaza" es enorme y que sus últimos minutos me evocan algo muy bonito que no sé definir, y que está presente en las más mágicas grabaciones de esta tendencia artística maravillosa que experimenta en los territorios vibratorios de la intención luminosa. Pero la magia no decae en ningún momento, como decía cada pista es una imagen de exquisita profundidad en la que perderse. Esas melodías sutiles de sintetizadores y sonidos percusivos que apenas destacan entre un fondo de grabaciones de la naturaleza, que invitan a abandonarse entre el entramado brumoso de su sonoridad. Los cantos de los pájaros, el crepitar, el agua y la música, todo conforma un todo indistinguible, ese entramado, esos arpegiadores al servicio de la sensación de maravilla y placer, y ese suave sonido melódico tipo viento que asoma de vez en cuando para acariciar con su melodía indefinida imbuida de serenidad, en "Ocean Plaza" y en "Turquoise Lagoon".
Para mí, esta cinta de Hybrid Palms es una de las más bonitas de lo que llevamos de año. Un año que musicalmente está siendo increíblemente rico, muchos proyectos están dando frutos maduros y otros más nuevos, como este, tienen la gran capacidad de sorprender y maravillar en una escena tan prolífica. Es además un inicio de lujo para Sounds of the Dawn, a quien hay que agradecer la constancia y el esfuerzo para traernos estos sonidos de paz y magia, belleza evocadora que los pobres humanos siempre necesitamos y hoy más que nunca.
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